miércoles, 27 de agosto de 2014

Hoy quiero escribir algo antes de acostarme. Hace tiempo que no escribo, es que estoy perdiendo la costumbre, y es que también estoy perdiéndome a mi mismo, cada vez que me niego, que no soy yo, estoy rechazando vivir esta vida de la forma en la que quiero, no estoy siendo yo, yo soy un desastre, mi forma de ser es siendo un desastre, no puedo permanecer por mas de un segundo siendo estable y calmado, ¿En que momento elegí esta comodidad irritante? quiero desastres, quiero sentirlo otra vez, sentir a flor del aire la palpitación de la incertidumbre, no me reconozco aquí, sentado así, echado así sobre esas flores muy coloridas que no marchitan nunca, soy alérgico al plástico, mi lugar es con la tierra, en las manos, en la cara, con la tierra bajo los pies, y debajo del cielo abierto, mi lugar es sentado en una banca de madera en algún litoral soleado, con un poco de hambre y un poco de sed, mi lugar es con un pie en la tierra seca, mi lugar es durmiendo poco, escribiendo mucho y fumando en exceso, inventando algún engaño de la nada, abierto a interpretaciones, combinaciones afortunadas, imágenes tan coloridas como sonoras, un dejo de intelectualidad pretencioso y sin sentido. Hoy es el centenario de Cortazar, cuan distinta hubiera sido mi vida si Santiago García no me lo hubiera facilitado, te lo debo. Cortazar, me hiciste abrazar sin pudor la belleza del desastre.

domingo, 10 de agosto de 2014

Tú no quieres conocerme, te lo advierto. Eres tan parecida a Magnolia, tienes casi la misma línea de ojos, prácticamente la misma cascada al sol, la cara un poco más larga, pero la misma neblina, la curva de los arcos de los pies es semejante, sin embargo más nariz que pómulos y ese es tu punto. Magnolia me dijo algo la última vez que hablamos, me dijo que quería que yo fuera su paralela, no Magnolia!, quiero ser tu perpendicular ¿Porque en esta vida tengo que ser tu paralela? ¿Correré hasta alcanzar la circunstancia? Y yo ahora debo hacer de ella mi paralela para reemplazarte a ti, ¿a quien le sigo prometiendo más mentiras? en la vida real no hay espacio para tales amores ¿en cuál vida sino? ¿en cual muerte, quizás? Y así dejé ir todos estos años de gentes, y te vi luego, caminando entre las gentes, muchos años después, ¿Porque dejamos que el destino nos arrollara como un tractor? Yo aún me imagino la vida contigo, como el primer día, y te vi de nuevo, tan bonita como siempre, pero la juventud ya se nos había escapado, y no fuimos hechos para envejecer juntos, debimos quemar nuestra juventud juntos, dejamos huir el tiempo, y lo empezamos a perseguir muy tarde, cuando ya iba muy lejos. Te mire tan triste, ¡salud por lo que pudo ser y no fue! ahora nuestras espaldas pesan tanto, al menos la tuya, yo siempre he estado dispuesto a volar con tu soplo, y sin embargo no. Nos veremos una noche más, no se si pronto, no se cuando, y te abrazaré, pondrás tu cabeza en mi pecho como siempre, y yo mi mano en tu cabeza, te oleré profundamente, apretarás mi mano, te besaré en la frente, pondrás tu pie entre los míos, y nos dormiremos así. Al otro día volveremos a nuestras vidas.