miércoles, 30 de marzo de 2016

Cuando era niño aún
me introdujeron en la maquinaria:
Devoré litros de aceite,
kilos de mierda,
toneladas de alquitrán,
maquinalmente.

Luego de años escape,
a pesar de todo,
solo había adelgazado
21 gramos


lunes, 21 de marzo de 2016

Puedo hacer que mis neurotransmisores devengan potencial de libertad.

 No    mas que un poco de   para     que mis neuro      transmisores devengan apertura devengan espacio      devengan libertad.

Hoy por hoy      más realidad que tenemos    , encontrar fantasías de potencias detrás de aparienSias , todas insustanciales. Contactar sentidos profundos . Devenir conexión en  experiencia . LISERGIA. potencial en un carton , microgota de milagro . potencial mirar frentes
Ello no es más que un principio de acción, el sádico devorador del yo es superyó. La sociedad autofagocitante. EL padre odia al hijo como la sociedad odia al padre. EDIPO es originalmente la paranoia paterna, instala al hijo escindido en el mundo. EL pequeño esquizoparanoide se defiende de padre. EL padre odia al hijo, el hijo ESCINDE al padre. AMBOS aman a la madre, la madre no ama a ninguno . niño introyecta a ambos. niño escinde su parte padre . niño no se ama desde su parte madre . niño ama al que no le ama . niño instaura instancia de superyó a partir del padre persecutor . CONTRA todo pronóstico , NIÑO deviene maquina DESEANTE.
Me amilano, y me pongo a llorar con angustia en la esquina del cuarto,
sujeto bifóbico de extremos:

Temo morir aplastado entre las grandes catedrales de granito, temo morir ahogado en inconsistentes oceanos líquidos.

No concibo puntos medios, puntos miedos

¡No olvidar!

No hay lugares bajo el sol

Tiranías de sentidos; nunca lograron tranquilizar a un sujeto pensante,

ideologías de la tranquilidad; nunca encontraron la sustancia, no tocaron al ser,

focos de paz; ¡no son mas que neuroticismo!,

psicóticos; por un segundo al menos vieron de cerca al ser real.
El sentido es tan frágil,
tan fácil perderlo,
en una mala mañana,
en una pequeña desilusión,
y se precipita al barranco.
Se abalanzan cuestiones de tipo:

¿Como dormir hoy?

¿Como vivir hasta mañana?

¿Como ignorar al tiempo y su insoportable tintineo?

¿Para que pintar muros con las manos, si afuera el sol sigue abrasando todo y calcinando el aire?

¿Para que escribir si al final nadie se encuentra con nadie?

¿De que sirve encender un cigarro si no me atreveré a suicidarme?

¿De que me vale llegar a casa si tengo tanto odio?

¿Para que moverse si en el mundo no existe ningún lugar?

¿Para que dormir si mañana hay que despertar?

¿Para que hablar si al final todos se abandonarán?

¿ Para que respirar si no me fulminará?

domingo, 20 de marzo de 2016

hay tantas vidas por vivir, y tan poca vida para tanto

sábado, 19 de marzo de 2016

Poemas de Bukowski

Fui a la cocina a buscar un vaso y un jarro de agua helada, más tarde la íbamos a necesitar, y volví a la habitación. Ella estaba recostada en la cama, había tomado uno de mis libros y lo estaba leyendo, poemas de Ch. Bukowski. "Lee el de la última página" le dije. Unos minutos después dejó el libro en el velador, se dio vuelta y empezó a besarme. Fumamos marihuana y follamos como conejos mucho rato, tres o cuatro veces de corrido, ella tuvo un orgasmo que la dejó aturdida. Nos abrazamos y pronto ella se quedó dormida, yo me levanté y fumé marihuana de nuevo, le tiraba el humo en la cara mientras me reía. No se despertó. Fui a la cocina y comí algo, volví a la pieza, follamos de nuevo y luego le preparé algo para comer. Volvimos a la pieza y follamos de nuevo, luego dormimos y despues volvimos a follar, estaba teniendo una erección de toro, no se me bajaba con nada. Dormimos hasta la mañana. Al otro día despertamos y follamos de nuevo, luego nos levantamos para ir a comprar algo para desayunar. Comimos pan con queso y tomamos café, nos repetimos los panes, y luego tomamos otro café. Antes de volver a la cama yo me acabé mi taza, a ella le quedaba la mitad todavía, se la llevó a la habitación y la dejó sobre el velador. Intentamos ver una película, pero faltando segundos para llegar al minuto cuatro de la película, nos comenzamos a besar. Dejamos el notebook a un lado, luego ella comenzó a desabrochar mi camisa, yo le quité la falda y la ropa interior, me puse encima de ella y comenzamos a follar de nuevo intensamente, la puse contra el respaldo de la cama, y con la fuerza de las embestidas se iba deslizando junto con las almohadas hacia el borde de la cama, luego de un par de embestidas violentas, llegó hasta el velador con el impulso y botó la taza, el café se derramo por sobre todo el velador, mojando el libro de poemas, y chorreando hasta hacer un charco en el piso, tuve que levantarme a buscar toallas de papel para limpiar el desastre. Tomé el libro que estaba empapado de café, lo levanté, goteaba y las letras de la portada se comenzaban a correr- era una edición barata de papel reciclado -. "Disculpa" me dijo ella "al menos se verá bonito el libro con las manchas de café". Lo pensé un segundo y le respondí "Bukowski estaría orgulloso de que follando hayamos derramado una taza de café sobre su libro". Más tarde me quedé pensando ello. Quizás hubiera sido mas a tono con Bukowski, que fuera una botella de whisky, pero bueno.


sábado, 12 de marzo de 2016

«Son los incendiarios! ¡Es el nihilismo! ¡Si algo arde, es el nihilismo!»  Se acabó el incendio.

las llamas consumieron el esqueleto de la catedral, ya podemos dibujar con las cenizas
lineas blancas y negra

jueves, 10 de marzo de 2016

corres una carrera contra el río
revolviendo tu entraña
de acá para allá
con gozo y gimiendo,
revolviendo tu entraña.
con los puños cerrados

sábado, 5 de marzo de 2016

vislumbro atravesarte a velocidad luz,
con un diapasón que sincronice tu estado,
predigo un diluvio,

predigo derrumbarte, desforestar el mar,
consumo el aire al rededor,
predigo un cataclismo

vislumbro un infierno terracota,
una fuente de tierra donde ahogarme,
predigo una cuerda abrazando mi cuello,
una cuerda de tierra,
una tumba de tierra,

tierra cristalina penetrando en mi ojo
sacudiéndolo,
escupiéndolo amorosamente

martes, 1 de marzo de 2016

que bueno que haya tanta gente al rededor, así puedo desaparecer sin que tantos lo noten

lunes, 29 de febrero de 2016

extrañar tiene mucho mas que ver con olvidar que con recordar

extrañar = volver extraño

echar (achar) de menos = hallar menos

te vuelvo extraño porque te he olvidado (abandonado)
si algo es recordado intensamente, no es olvidado, y por la tanto no extrañado

aquello te era conocido, familiar, y luego no lo es = ominoso, lo fantasmal

martes, 23 de febrero de 2016

quiero mirar sin tener que hablar

miércoles, 17 de febrero de 2016

como saber          , como descubrir,,,    qué es capaS de soportar un cuerpo

cuantas definiciones            soporta, cuales              repudia,           cuales,cualeslesson,,afines

que potencia esconde un cuerpo, cuanto se puede InscribiR sobre él

el cuerpo como campo simbólico, qué cartografías permite, qué geologías son posibles, cartografías del placer, cartografías del dolor, cartografías guerr er a s, cartografías de liVeración

como en mi cuerpo puedo fugar, puedo resistir, puedo combatir, sin perder el cuidado

komo ago de         mi,,,cuerpo,,,,,camino           ,,   vehículo







para.....recorrer          cualquier,cartografía, para,resistir,cualquier,intento,de     ,,,,,,,,,,,,,  mapeo

como volver  cuerpo invisible,, invencible, ,  ,  ,imposible, para, cualquierA ..   ...código, ventiscaentresusmanos

jueves, 11 de febrero de 2016

cuando me sumergí, dentro de mi escafandra, huérfano de mi batiscafo que huyó aterrorizado, caí desnudo entre las mareas rojizas de la magnolia, y me ahorcaron. En la confusión de la asfixia, compulsivamente quise abrazarte, y tus palabras se vaporizaron con la luna de septiembre, estigmas amarillos por todas partes, desaparecieron como de costumbre, volví a fallar, y me dejé caer cercenado, vacío de todo magnetismo que pudiera contener mi pérdida de unidad. El suelo estaba frío como siempre, pero se sintió glacial al contacto rudo, mil agujas de hierro se clavaron en mi cuerpo, y la culpa mordió como el licántropo del aislamiento, profiriendo en soledad un arrepentimiento sordo de explicaciones, y tu te ríes y miras para el lado, y el orbe rota incesante, y en un punto de esta casa, el tiempo se queda estancado en una gravedad particular, que absorbe con la fuerza de un ciclón creando un vacío de densidad infinita, y tu te ríes y miras para el lado, y mi ruiseñor enjaulado se calló otra vez, degenerando en un espectro un poco más, la fricción de las manos en la cara, la vista empañada, y desear dormir muchos años, esperando que el titán del tiempo arrase contigo como el invierno con las magnolias.

miércoles, 3 de febrero de 2016

hoy es un día en que fácilmente podría morir si me pusiera a escribir, a escarbar en el rincón de las cajas, los paquetes, la herrumbre mohosa. Me das tanto miedo. Como podría encontrar una respuesta a mi pregunta que no admite respuestas, al nudo sin extremos.

martes, 2 de febrero de 2016

muchas personas me intrigan, parecen guardar un secreto,
yo me acerco a ellas, me interesan, siempre intuyo que guardan un secreto,

algunas me han aceptado cerca, a varias he conocido,
y sin embargo nunca he podido encontrar su secreto.

Hasta hace poco no lo sospechaba,
ella me abrió el camino hasta lo más profundo de su centro,

percibía en ella un gran y hermoso secreto,
que irradiaba todo el maravilloso resto,

como un niño me interné en ella,
sin saber mucho que hacer,

lo maravilloso de su centro, su secreto,
era no guardar ningún secreto,

volví, perplejo,
y la interrogué, por cierto

¿qué es lo que se esconde allí?
¿cuál es su secreto?
allí no se esconde nada, no haygran secreto
Entre las letras de mi nombre están revueltas todas las letras de tu nombre,
en el espacio entre tus dedos están todos los silencios que tu mano pone en mi boca,
en los sonidos de tu pecho están todos los silbidos que a mi oído desesperan,
en el aire que tu exhalas está toda la atmósfera que mi cuerpo habita

miércoles, 27 de enero de 2016

Al calor de dios, la revolución
sácame los ojos por favor,
dos vueltas a la manzana,
estar tirado en tu cama,
cómeme las entrañas,
en el nombre de la revolución,
destrípame, ángel,
hay un gato en la ventana,
un gran ramo de flores marchitándose en la ventana
entra por la ventana
¡Entra ya por la ventana!
viaja de vuelta por favor,
necesito que te rías como un conejo o como un farol de la calle en la noche,
que te rías tapándote los dientes con la mano,
que te tapes las orejas con el pelo,
que te recojas el pelo con una mano,
que te rías con esa sonrisa amarilla de viento de la tarde
Desnudémonos como niños, con todas las formas obtusas,
saltemos a la piscina drogados, pegados como camaleones gemelos,
juguemos con los pies en el agua, mirándonos las pieles,
tiremos las viejas pieles y las jóvenes pieles a secarse en la baranda
y caigamos desnudos sobre las sillas, recostados, que quiero cartografiarte entera y beber tus cataratas
lamer tus ácidos y tus alcalinos
quiero clavarte como a un ángel con una espada
revolverte las visceras,
y dormir dentro de ti


Nos quiero a los dos
en ropa interior
escuchando música
en tu habitación

viernes, 22 de enero de 2016

Inventario de huesos

A Clara la conocí en la facultad, estudiábamos lo mismo. Coqueteaba con ella, la sentaba en mis piernas, creía yo entonces, pero en realidad era ella quien me ponía a mí bajo su cuerpo en las sillas de los bares cuando salíamos. Cuando supe que la había conquistado no la quise besar, era aún un niño romántico. No. Clara era la chica más guapa de todas, se escondía, se tapaba las orejas con el pelo, pero tenía unas orejas hermosas. Ella me necesitaba para que pudiera verle las orejas cuando nadie más podía verlas. Pronto nos pusimos de novios. La primera vez que follamos estábamos en mi habitación, un rincón adolescente con espejos y flores secas. La desnudé con ansiedad. Era de verdad muy hermosa. Tuve tanto miedo que no pude lograr una erección. Nos reímos y fuimos a comer. En la cocina la miré ardorosamente, yo estaba detrás de ella. Su cuerpo me excitaba tanto. La acaricié, nos desvestimos y follamos contra el lavaplatos, contra la cocina, contra el refrigerador y luego contra el mueble de los platos, era increíble. No paramos nunca de follar, un tiempo después ya hacíamos el amor. Ella siempre tenía ganas de follar, yo también, gracias a esa sincronía nos entendimos muy bien, dentro de la cama. Y peleábamos y ella lloraba y yo me enojaba. Tenía una hija pequeña, que tenía un padre manipulador. A Clara la quería mucho, nos besábamos en la calle y todos nos odiaban
Yo me sentaba a leer en el pasto, me apoyaba en sus piernas, ella hacía cualquiera cosa. Siempre hacía como si no me entendiera, pero yo se que me entendía sin darse cuenta.
Cuando todo estaba muy mal con Clara fue cuando conocía a Lisa. Es decir, la conocía desde hace años, demasiado bien, pero entonces fue cuando volví a conocerla, demasiado bien nuevamente, Lisa era una víbora en todo el sentido de la palabra, su vida entera era bífida. Amaba al cerdo de su padre que la abandonó y odiaba a su madre que era una pobre cuarentona suicida, que hacía grandes esfuerzos por mantenerse viva para sus tres pobres hijos, Lisa, y los otros dos pequeños. Yo la admiraba un poco, a la madre, y ella me quería bastante. Lisa tenía un novio, pero se acostaba conmigo, le decía que lo amaba, y a mí también, aunque sé que en realidad no amaba a nadie. Al menos me decía que me amaba más que a él. Con eso me bastó un tiempo. Él se llevaba las peleas y la convivencia, conmigo la literatura, el sexo y las películas. El sexo con Lisa era distinto, era un ovillo de espaldas torcidas, todo era estrecho y mezquino. Amaba verle la nariz, tenía la nariz más hermosa que existiera. La follaba desde atrás y ella volvía la cabeza para mirarme. Clara en cambio follaba con los ojos cerrados, y yo le mordía el cuello. Con Lisa siempre sentía el fondo, Clara era profunda como el mar. Tocar el fondo es exactamente como lo describe Baudelaire, ser un moribundo que acaricia su fosa.
Clara y Lisa eran muy distintas, pero también eran muy iguales, las podía desnudar por capas. Con el tiempo se iban desintegrando de la misma manera en que se descalcifican los huesos, en la médula habitaba lo mismo siempre, la neurosis.
Yo no soy el tipo más sano tampoco, pero como dice Joyce, al menos puedo ser Kinch, y llevar la más hermosa de las máscaras. No tenemos porque hablar de mi justo ahora, o si.
Durante un tiempo todo esto me importó mucho, tanto que le escribí un generoso libro a Lisa para decirle cuanto la odiaba, y la llamé Magnolia. Usaba metáforas hermosas sobre pinturas de Goya y Caspar David Friedrich, intentaba escribirle como Cortázar, intentaba profundizar en víboras inconscientes y psicosis. A Clara solo le escribí poemas de amor y melancolía que hablaban sobre búhos celestes, constelaciones y abrazos maternos ausentes. Como dije antes, todo esto me importó mucho por un tiempo, luego me volqué a otros derroteros, conocí nuevos vértigos posmodernos, me bauticé cyberpunk. Ahora solo es la confección de un inventario de huesos. Houellebeq tenía las llaves de la morgue, me volví un especialista de las autopsias.