jueves, 6 de agosto de 2009

Los Viejos Buenos Tiempos

En vida veo la decadencia y muertede mi único objeto de admiración, del único que, orgullosamente admito, me puedo declarador admirador ferviente. Quien manda los patrones morales a la mierda y vive como le da la gana con coherencia y consecuencia, y es precisamente lo que no quiero llegar a ser y por ello mismo lo admiro, por ser la persona que nadie quiere que sea, pero que todos secretamente admiran por su valentía de serlo,y si no todos, al menos yo si lo hago y no en secreto. Si solo tuviera la mitad de la decisión y la valentía para desligarme completamente de las amarras de la sociedad y desarrollar todo mi potencial humano como el lo hace. Sin vergüenza construir en la tierra tu utopía, y vivirla a fondo, aunque nadie lo crea, con tal que te lo creas tu mismo es suficiente, ser consecuente y llegar hasta las últimas instancias. Porque no importa que la Reina Boadicea haya muerto hace mucho, su espíritu vive en los hijos de sus hijos de sus hijos. Pero amigo no pierdas la fe en el amor y la música, pues si la pierdes tu, la perderé yo también y eso será el fin. Sabes que he intentado mucho por no caer en mis antiguas costumbres, y me hiere el corazón oirte clamando por los viejos buenos tiempos, entiende que no existen esos viejos buenos tiempos, ¡Estos son los viejos buenos tiempos! No es acerca de todo lo que te puedan dar, ni la maldad de sus ojos que te pueda herir, ni lo que odian en lo profundo de su mente, es sobre nuestros sueños, sobre nuestros juegos, y sobre esa lista de cosas que dijimos haríamos mañana ¡Esa lista de cosas que dijimos que haríamos mañana! El sueño Arcadio ha caído completamente, pero El Albion sigue navegando, deja a los hombres levar anclas y preparar el viaje, que los hombres-cerdo han encontrado la fuente y aún hay doce marinos en los remos.





Chao Pescao*

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